Conozca los avances y retrocesos de Asia Pacífico en equidad de género

Uno de los debates que cobra cada vez más fuerza es la discriminación que viven diariamente millones de mujeres en todo el mundo. Por este motivo, tras liberarse los resultados del último Índice Global de Disparidad entre Géneros del Fondo Económico Mundial, publicado en junio de 2014, realizamos un listado para conocer la realidad de las mujeres en los países del Asia Pacífico, dando cuenta del nuevo liderazgo de Filipinas en esta materia, de los tímidos avances de India y de la baja de Japón y Corea del Sur.

El liderazgo filipino

Puede resultar una sorpresa para muchos, pero lo cierto es que Filipinas ha hecho méritos de sobra para saltar al primer lugar de Asia Pacífico (5º en la tabla general). Principalmente por sus logros en educación –la Constitución ofrece a las mujeres la igualdad de acceso a la educación, incluso, la matrícula de las mujeres es mayor que la de los varones en todos los niveles educativos-, salud -gracias a normas como la Ley de Salud Reproductiva de las mujeres- y participación económica. Filipinas es el país número uno a nivel global en ambas categorías.

Le secunda Nueva Zelandia, ocupando el séptimo lugar. Si bien baja un puesto respecto a la entrega anterior, destaca entre los 15 mejores países en cuanto a la participación económica y oportunidades, así como también respecto al logro educativo. Además, está entre los 10 países con mejor actuación en el empoderamiento político. Esto se debe a medidas adoptadas para velar por la igualdad de género, como la creación de la Comisión de Derechos Humanos.

Otro caso destacable es el de Australia (24), que sube un puesto. Sus altos niveles de educación, participación económica y política han permitido un desarrollo más integral de las mujeres. En materia educativa se destaca fundamentalmente por el aumento de mujeres presentes en la educación secundaria superior. Este país también ha establecido una comisión independiente que se ocupa de la igualdad de género.

Más atrás le siguen Sri Lanka (55), Mongolia (58) y Singapur (60), en donde el avance hacia la equidad entre ambos sexos se concentra en la participación económica y la cantidad de oportunidades generadas para las mujeres. El rasgo negativo es la falta de mujeres en cargos de relevancia política, ya que no hay representantes femeninas encabezando los ministerios. China también registra avances y se ubica en el lugar 69 de la tabla mundial.

El descenso de Japón y Corea del Sur

En el otro extremo, encontramos países del Asia Pacífico que tienen una gran deuda en términos de derechos y oportunidades para el desarrollo de las mujeres. Es el caso de Japón (105), que desciende cuatro puestos y destaca dentro de este índice por su bajo porcentaje de mujeres en altos cargos y por la falta de profesionales bien calificadas. De hecho, Shinzo Abe acaba de presentar un plan de estímulos para modificar esta realidad. Por otra parte, el estudio destaca que sólo un 13,4% de los parlamentarios japoneses son mujeres y se estima que cerca del 60% de las mujeres deja de trabajar después de tener su primer hijo.

India -al contrario de Japón- mejora cuatro posiciones (101), pero continúa con dificultades para las mujeres que derivan de la mala salud, la educación y la gran brecha económica y sigue siendo el país peor posicionado de los BRIC. Además, existe una notable desproporción de sexos al nacer, pues muchos padres prefieren abortar cuando saben que esperan una hija. Según la OCDE, el número de abortos selectivos de niñas pasó de 3 a 6 millones en la década del 2000 en India. Una medida que ha tomado este país es la introducción de la alimentación escolar que ha aumentado el número de años que las niñas -no los niños- asisten a la escuela.

Otro que bajó en el ranking fue Corea del Sur (del 108 al 111) que debe remediar el bajo porcentaje de mujeres en altos cargos para avanzar favorablemente en términos de paridad. Al igual que en 2013, este año el país destaca con un gran avance en la educación de las mujeres jóvenes coreanas. Sin embargo, esta evolución no ocurre el mercado laboral, donde persisten las amplias diferencias salariales de género. Como aspecto positivo para el progreso en este ámbito, se observa la base legal otorgada recientemente en Corea a los presupuestos sensibles al género.

Chile baja cuatro puestos

Chile no está libre de la deuda con las mujeres. Nuevamente registra una caída en la clasificación general de Latinoamérica y el Caribe. Bajó del 46 en 2012 al 87 en 2013. Y el informe 2014 lo ubica en el puesto 91 global, es decir, 22 entre 26 países de América Latina y el Caribe. El cambio se debe a la baja en el porcentaje de "sueldo a igual labor" (lugar 125), a la participación en la fuerza laboral (puesto 95) y a la baja cantidad de mujeres en el Congreso (llegaba sólo al 13,9% de los escaños en 2013).

Según la diputada Camila Vallejo, el informe deja en claro una serie de falencias graves en materia de equidad que Chile debe solucionar. "Es sumamente importante avanzar en la paridad de género en el ámbito de la política, especialmente a nivel ministerial que es donde se impulsan las políticas públicas. Y más allá de esto, como país debemos caminar hacia una nueva institucionalidad que garantice la igualdad de género, tanto a nivel constitucional donde se consagre el derecho de las mujeres, la autonomía y la dignidad de las mujeres", sostuvo.

Además, la congresista valoró los avances de países de Asia Pacífico en este ámbito. "Me parece destacable que Australia tenga una comisión independiente para velar por la igualdad de género y que Nueva Zelandia haya creado una instancia similar dentro de su Comisión de Derechos Humanos. Nosotros tenemos con orgullo a Claudia Pascual presidiendo el futuro Ministerio de la Mujer -actual SERNAM- , quien tiene mucha experiencia en la lucha social de las organizaciones femeninas y  desde el Ejecutivo va a impulsar la agenda de género. Estas necesidades son globales y debemos hacernos cargo de ellas", concluyó la parlamentaria.

El Índice Global de Disparidad entre Géneros evalúa a 136 países –equivalentes al 93% de la población mundial- según cuatro categorías para conocer la brecha entre hombres y mujeres: participación económica y oportunidades, salud y supervivencia, logros educativos y empoderamiento político. A partir de ellas se desprende una correlación entre igualdad de género y el nivel de competitividad, el PIB per cápita y el desarrollo humano de los países en cuestión.